Hace casi una década, viviendo en Singapur, empecé dos caminos que, a primera vista, parecían totalmente desconectados: me convertí en profesora certificada de meditación, al mismo tiempo que iniciaba mi viaje en TSC.ai, la empresa líder en la aplicación de inteligencia artificial para la gestión estratégica de key issues y stakeholders en grandes empresas globales.
Durante años, pensé que estas dos realidades nunca se cruzarían: una enfocada en la mirada interna, la claridad mental y el autoconocimiento; la otra, profundamente tecnológica, basada en datos, análisis predictivos y un entendimiento preciso del entorno externo.
Sin embargo, en un mundo cada vez más VUCA (Volátil, Incierto, Complejo y Ambiguo), se hizo evidente que estas dos realidades no solo se encuentran, sino que dependen profundamente una de la otra. Las empresas y los líderes necesitan cada vez más herramientas avanzadas, como las soluciones de inteligencia artificial que desarrollamos en TSC.ai, para navegar por el exceso de información y encontrar lo que realmente importa entre más de 216 mil fuentes analizadas cada día. Al mismo tiempo, la habilidad de mirar hacia dentro se ha vuelto esencial para gestionar los más de 60 mil pensamientos que pasan por nuestra mente a diario, muchos de ellos generando ruido, ansiedad e inseguridad.
Durante mis últimas vacaciones, mientras recargaba energías en Nepal y Bután, me encontré con una noticia que reforzó esta idea. El periódico butanés Kuensel informó que monjes budistas están probando el BuddhaBot, una inteligencia artificial creada específicamente para responder preguntas sobre la doctrina budista. Fue un momento revelador, un ejemplo claro de la convergencia entre el profundo conocimiento espiritual y las tecnologías más avanzadas de hoy.
Este inesperado encuentro entre meditación e inteligencia artificial confirma la enseñanza clásica de Siddhartha Gautama: el camino correcto siempre es el del medio. Ni completamente tecnológico, ni completamente espiritual; el futuro pertenece a las organizaciones y líderes que sepan combinar con sabiduría estas dos fuerzas.
En TSC.ai, aplicamos IA todos los días para dar claridad estratégica a las principales empresas globales. Entendemos que es fundamental mirar tanto hacia fuera—mapeando tendencias, stakeholders y movimientos clave—como hacia dentro, desarrollando la calma y la capacidad analítica necesarias para interpretar esta información y actuar con precisión.
En el mundo VUCA, el éxito no estará solo en la tecnología avanzada o en la práctica meditativa por separado, sino en la capacidad de integrarlas con equilibrio, tomando decisiones más conscientes, sostenibles y efectivas.
* Por Amalia Casas, CEO Americas de TSC.ai
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